La denunciante «M» aseguró que la madre de Sergio Alila llama a su familia para tratarla de «mentirosa, p… y de meter presa a una pobre persona inocente».
«Creo que le están por dar domiciliaria no más, firmé para que hagan lo que quieran. Me cansé de declarar, no sé para qué quieren que declare más de 20 veces. No sé qué querían sacar con eso», contó «M», una de las jóvenes que denunció a Sergio Osvaldo Alila, hombre ya condenado por la Justicia a cuatro años de prisión por abuso sexual simple a otra mujer cuando la víctima era menor de edad.
A casi tres años de que finalmente «M» decidiera dar un importante paso y denunciar a Alila, quien hasta 2020 era un «instagrammer» conocido por las acusaciones en su contra, la joven continúa recorriendo un tormentoso camino que la llevó a obtener una inédita cautelar en la provincia.
En diciembre de 2021, la jueza de Faltas de Barranqueras, Sandra Saidman, dispuso una medida cautelar a favor de la denunciante «M» por el constante hostigamiento del que era víctima por parte de la madre de Alila tanto por llamadas telefónicas como por Whatsapp y otras redes sociales.
¿Algo cambio? Pese a la medida cautelar que establece que, de continuar dicha situación, los padres del denunciado por abuso sexual podrán ser detenidos, para «M» la situación «no cambió».
«Su mamá empezó a acosar a mi familia, la llama a mi mamá, le dice que le va a hacer bardo en el trabajo, un montón de cosas. La llama todos los días. Siempre me acosaron, desde que denuncié. Por estas situaciones hice como siete denuncias. Le dice que yo soy una pu.., que soy una mentirosa, un montón de cosas. Que yo metí presa a una pobre persona inocente «, contó con crudeza la joven que más de un año después de la medida cautelar que logró acusa seguir siendo víctima de constantes hostigamientos.
A la espera del segundo juicio en contra Alila, «M» sigue siendo revictimizada y desde su entorno señalan que nunca se le ofreció contención psicológica pese a los constantes hostigamientos y pese a que se hizo pública y se descontextualizó su declaración en los acuerdo para arribar a un juicio abreviado, instancia a la que se pretendía llegar para concluir cuanto antes con el proceso.
Pese a la búsqueda de justicia, la víctima intentó tomar distancia de todo el proceso judicial y firmar diversos poderes a su defensa para no tener que volver a repetir historias con el temor de que todo lo que declare sea nuevamente objeto de filtraciones, descontextualización y burlas. La última novedad en la causa podría ser la prisión domiciliaria, un pedido de la familia del condenado por abuso sexual producto de los problemas psicológicos que esgrime su defensa.
¿QUIÉN ES ALILA?
Hasta abril de 2020 Alila se había ganado cierta «fama» en redes sociales, no por el contenido que generaba sino por los escraches que hacía un tiempo sumaba en su contra. Lo acusaban de abusar a menores, algo que él en algunas oportunidades negó y en otras se encargó de afirmar que la hizo «muy bien». Sin pruebas no hay delito, era la premisa del joven que tras hacerse públicas las denuncias formales en su contra decidió construir una narrativa para ridiculizar a sus denunciantes, a la justicia y a movimientos feministas, que a su criterio lideraban la campaña de desprestigio en su contra.
En el juicio que se llevó adelante en junio de 2022 por la denuncia de otra víctima, se concluyó que Alila llevó a la menor hasta su departamento ubicado en avenida Sarmiento donde la abusó sexualmente pese a la negativa de su víctima. Posteriormente la mantuvo encerrada, sin que ella pueda huir de ese lugar. Aquella noche y madrugada, la adolescente decidió mantenerla oculta por los diversos sentimientos que la atravesaban –detallados en el informe de una entrevista y en el que una psicóloga observó indicadores de abuso sexual-, sin embargo, producto de los escraches por parte del exinstagramer, decidió denunciarlo formalmente y llevar a la Justicia lo que le había ocurrido.
Sabía moverse en el mundo virtual y es allí donde se contactaba con jóvenes, excusándose en su desempeño en una agencia de modelos local, según surgió del relato de mujeres. «Hacía reuniones con chicas de 14, 15 o 16 años» en su «función de recolectar chicas para una agencia de modelo», reconstruyó la fiscalía. Fue así que reclutó a quien la Justicia determinó como su víctima: una adolescente de 14 años a quien Alila le habría asegurado tener 18, cuando en realidad tenía 12 años más.
La juez en lo Correccional N°2 de Resistencia, Analía Fernández Florani, condenó al hombre de 34 años a prisión efectiva por abuso sexual simple en concurso real con privación ilegítima de la libertad. Una condena importante de cara al juicio por jurados que se prevé por las graves acusaciones que realizó «M» en contra del imputado.
Fuente: Diariochaco