Según se pudo saber, uno de los puntos que fundamentan los camaristas en apelación indica que el acusado utilizó el puño y golpeó en partes donde no pudo ocasionar muerte.
También destacan que no usó ningún objeto al momento del ataque, que estaban solos y hay indicadores que la intención fue de lesionar y no tuvo conducta homicida.
Casco fue llevado a los tribunales por femicidio calificado por la relación de pareja en grado de tentativa, según acusó la querella, aunque el Juzgado de Instrucción 1 de Goya, a cargo de Lucio López Lecube, imputó por «lesiones graves mediando violencia de género contra su pareja».
El magistrado le había negado la eximición de prisión y pasadas algunas semanas del ataque, el acusado se presentó a la Justicia. En julio último fue procesado y permaneció detenido hasta la actualidad.
POLÉMICA JUSTIFICACIÓN