Un caso de violencia hacia las mascotas conmociona a Garupá. En la tarde de ayer se conoció que una mujer junto a sus hijos mataron a un can que deambulaba en estado de abandono en proximidades a La Saladita. Al parecer esta persona quemó al perro con agua hirviendo y plástico caliente hasta ocasionarle la muerte.
El hecho se registró en el barrio Nuevo Garupá y generó repudio de agrupaciones proteccionistas de los animales como así de los vecinos del lugar, que no salían del asombro por lo sucedido.
Desde la asociación El Refugio de Animales explicaron: “Se trata una vez más un caso de crueldad sin límites en nuestra provincia. Todavía no podemos salirnos del asombro, impotencia y dolor para entender tanta maldad”.
Los integrantes de la agrupación que funciona en el oeste posadeño detallaron que el “perro fue quemado vivo, lamentablemente llegamos tarde. Si hubiera sido trasladado a una veterinaria enseguida, probablemente sería otro su triste final. Pero nadie lo ayudó”.
Asimismo, desde la entidad proteccionista dijeron que realizaron una denuncia policial en la comisaría local. “Vamos a estar informando de las novedades del caso que ya pasó a la fiscalía”, señalaron, al tiempo que pidieron “encarecidamente a quienes son testigos de maltrato o crueldad hacia un animal, se acerquen a la comisaría mas cercana a hacer la denuncia. Eso puede ser la diferencia entre la vida y la muerte de un animal. La violencia contra los animales es una señal de alerta que no debe ser tomada a la ligera”.
Además se supo que otros proteccionistas de los derechos de las mascotas organizaban ayer una protesta para ir hasta el domicilio de los atacantes y concretar una marcha pacífica.
Este nuevo caso en Garupá trasciende cuando aun hay conmoción por Papo, el perro pitbull de Eldorado que estuvo encerrado cinco meses sin agua y comida y logró ser rescatado y reponerse del maltrato.
Este caso había generado tal revuelo en la sociedad eldoradense que frente a esta problemática, los vecinos exigieron a los concejales la aprobación de la ordenanza municipal referida a la tenencia responsable de mascotas, una medida destinada a prevenir la aparición de nuevos casos de abandono animal.
Esta norma protegerá a las mascotas, ya que sus agresores serán sancionados por arrojarlo o abandonarlos en la vía pública, en viviendas cerradas o sitios desalquilados, sea que estén vivos o muertos.