Jair Bolsonaro se convirtió en el nuevo presidente de Brasil tras haber derrotado a Fernando Haddad (del Partido de los Trabajadores) y es tan fanático del fútbol como su par de Argentina, Mauricio Macri.
Así lo confirmó su hijo, Eduardo, quien aprovechó para alentar al Palmeiras y pegarle a Boca en la previa de la semifinal de la Copa Libertadores: «No me gustan ellos, la Bombonera tiene feo olor».
Eduardo es político como su padre y fue elegido diputado del Partido Social Liberal en 2014. ¿Su equipo de fútbol? El Botafogo, uno de los equipos con más hinchas de Río de Janeiro.
En diálogo con MDZ Radio, dijo: «Soy fanático del Botafogo, pero hincho para el Palmeiras. Y no me gusta Boca, en La Bombonera hay feo olor».
Bolsonaro, el presidente de las mil camisetas
Bolsonaro es el nuevo presidente de Brasil luego de ganar en la segunda vuelta electoral con el 55% de los votos. Hombre de ultraderecha y muchas camisetas. ¿Cómo? Sí, porque si bien se declaró hincha del Palmeiras, lo cual tiene lógica porque nació en San Pablo, durante la campaña para sumar votos se puso la de muchos equipos brasileños.
Bolsonaro tiene una identidad política y social bien definida: defendió la dictadura militar en Brasil y son lamentablemente conocidas sus expresiones machistas, homofóbicas y sexistas. Pero en el tema fútbol está más complicado. Hasta dijo que también es hincha del Botafogo de Río de Janeiro.
Antes y durante la campaña, el presidente electo recorrió distintos estadios de Brasil y presenció muchos partidos de diferentes equipos, donde siempre se mostró alentando a uno de los dos protagonistas, y no tuvo problemas en posar con cada una de las camisetas que le alcanzaron. Cuando le preguntan de qué equipo es responde «Palmeiras y Botafogo».
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