La chaqueña fue presentada en el día de ayer oficialmente por Boca Juniors y Diario TAG pudo hablar con la delantera para charlar sobre sus comienzos en el fútbol, su pasión por el deporte, su paso glorioso por San Luis FC y el, por ahora, momento cúlmine de su carrera: su llegada a uno de los grandes del continente, el Club Atlético Boca Juniors.
Su infancia en su natal Margarita Belén estuvo marcada por el deporte. «Mi carrera empezó más que nada por un hobby, me juntaba a jugar en las canchitas del barrio de mi casa, con mis amigos y algunos familiares», comienza a recordar aquellos momentos donde la pequeña Raquel iniciaba los primeros pasos en el apasionante mundo del fútbol. Era la única niña entre todos aquellos pequeños que compartían goles, paredes y patadas con nuestra protagonista.
Luego ese «hobby» se convirtió en una práctica común: «A medida que fui creciendo, fui jugando distintos torneos futbol de salón, futbol siete, nueve, once, pasé por todas las canchas», comenta Polich entre risas.
De todas maneras, aunque declara que la pelota de fútbol fue su primer amor, no fue el único. La «Raque», como es conocida por todas sus amistades, también practicó handball, deporte rey en Margarita Belén, y atletismo.
En el primero tuvo sus momentos de gloria, defendiendo los colores del CEF de Margarita y también del Club Chaco For Ever, bajo las órdenes del máximo exponente del deporte en la provincia, Javier Pérez Kohut. Esos fueron años donde los laureles estaban representados en forma de medallas en campeonatos provinciales y nacionales, consiguiendo trofeos de campeona y reconocimientos como mejor jugadora y goleadora en diferentes torneos. Toda una vida ligada al deporte.
Ya consagrada en el mundo del handball, era momento de conquistar otro tipo de cancha. Luego de defender los colores de San Fernando de Margarita y del Club Villa Alvear, llegó el momento de representar, una vez más, a la selección de su provincia (ya lo había hecho en el balonmano).
Esta vez la cita era en el Torneo Provincial Femenino, en la provincia de La Rioja, dónde consiguieron un primer puesto histórico luego de vencer 2 a 0 al combinado santafesino. Raquel salió elegida mejor jugadora del torneo. Comenzaba un ascenso meteórico que hoy la deposita en uno de los mejores equipos femeninos del país.
«En 2019 tuve la dicha de dicha de salir campeona con mi provincia y de que me elijan mejor jugadora. No me imaginaba ese tipo de futuro, pero creo que las cosas por algo. Fue algo muy hermoso ser reconocida en tu provincia«, recuerda conmovida.
Comenzando el 2022 apareció un nuevo club en la vida de Raquel, San Luis FC. «La posibilidad de San Luis llegó por medio de una compañera mía de handball, que es la pareja del actual DT, Carlos Casteglione. Ella sabía que toda mi vida jugué al futbol y me pidió que mande unos videos», comienza Raque. «Coordinamos una prueba y les gusto, de todas maneras, había que ganarse el lugar y las cosas se fueron dando».
Vaya se si dieron las cosas y se ganó el lugar. San Luis FC, fundado en 2022, salió campeón de Primera C de manera invicta (13 ganados y 4 perdidos) y pudo lograr el histórico ascenso para un equipo del interior. Raquel, con 19 goles convertidos en el torneo, logró terminar quinta en la tabla de goleadoras, y por un gol, no fue la goleadora de su equipo.
«Lograr el ascenso con San Luis fue algo hermoso, un objetivo que quería cumplir. Lo merecíamos porque veníamos luchando hace mucho. La verdad, estoy muy orgullosa de mis compañeras de poder haber cumplido los objetivos que nos propusimos en la pretemporada. Dimos todo», recuerda Polich.
De todas maneras, no fue todo fácil para la chaqueña. «La adaptación fue difícil, los primeros días fueron complicados porque era la primera vez que salía de la provincia. De todas maneras con el correr de los días, mis compañeras me hicieron parte del grupo y ahora puedo decir que son como mi familia«, expresa Raquel recordando aquel momento.
Todo el esfuerzo y sacrificio valió la pena. Gracias a su empresa de representación consiguió una prueba en el club de sus amores y partió a Buenos Aires con el bolso lleno de ilusión.
«Llegué a Boca diciendo ‘bueno, es una semana y voy a disfrutar’», confiesa la delantera. «Todos confiaban en mí y gracias a Dios se me pudo dar. Todavía no caigo que estoy acá y los esto me demuestra que los sueños están para cumplirse«. De todas maneras, nuestra protagonista no se achica y ya piensa en el futuro: «Ahora el sueño que tengo es poder convertir un gol en la Bombonera y gritarlo con la gente. Otro sueño hermoso sería poder vestir la camiseta de la selección».
Ante la consulta de cómo reacciona ante un gol en la Bombonera repleta de gente, Raquel contesta entre risas: «Me muero muerta».
Aquella pequeña que empezó a correr atrás de una pelota de fútbol en un barrio de una localidad chaqueña junto a sus familiares y amigos, que brilló en el handball y el atletismo local, hoy se pone la camiseta de uno de los grandes del continente para seguir alimentando sus sueños de gloria.
Fuente; Por Ramiro Rolón Martínez
Periodista diario tag
