Momentos de desesperación se vivieron esta mañana en un colectivo de la línea 110, cuando una niña de menos de dos años comenzó a convulsionar y fue asistida por pasajeros que, junto con el chofer de la unidad, se abocaron a llegar a tiempo al Hospital Pediátrico de Resistencia.
Una de las pasajeras que presenció la descompensación de la nena contó que fue una «escena cinematográfica» a toda velocidad. «Nadie se movió del colectivo, el chofer se dio cuenta de la situación, llamó a la empresa para notificar. Ahí empezó a circular más rápido en medio de un tránsito caótico y después sacaron el pañuelo blanco».
La mujer relató que mientras circulaba la unidad, llegando al Regimiento, la niña «empezó a vomitar, en un momento determinado tenía los ojos dados vueltas y estaba morada, parecía que no respirada. La madre entró en una crisis de llanto».
«Uno de los pasajeros le agarró la lengua porque era una convulsión y otra mamá le hacía masajes en el pecho», describió sobre las maniobras de primeros auxilios aplicadas por los presentes.
Camino al Pediátrico, se toparon con una camioneta de la Policía y ante los gritos de los pasajeros, el móvil «prendió la sirena para liberar el tránsito hasta que se llegó».
Una de las médicas del Pediátrico «Avelino Castelán» que atendió a la niña, Rosana Infeld, confirmó a Diario Chaco que «está bien y ahora se le están haciendo otros estudios», luego de ingresar de urgencia con el diagnóstico de «convulsión con fiebre».
«No fue necesario realizar otras maniobras de primeros auxilios porque entró respirando. En estos momentos todavía sigue internada, se le están realizando estudios», detalló.
Por último, la pasajera testigo destacó el «accionar del colectivero y las demás personas que no dudaron un segundo en hacer lugar para tratar de llegar y salvar esa pequeña. Héroes hay en todas partes. Solidaridad y empatía».
