Las parejas Taya y Sean Hartless y Alysia y Tyler Rogers se conocieron online hace tres años en un intento de ponerle emoción a sus relaciones alrededor de principios del 2019. Después de un año en el que ambos pares (que tenían un hijo cada uno) se conocieron y enamoraron, comenzaron a practicar formalmente el poliamor y se mudaron juntas al estado de Oregon, en los Estados Unidos.
“Ninguno de nosotros había sido poliamoroso antes, pero todos nos conocimos y nos enamoramos. Desde que nos mudamos juntos, todos somos padres compartidos de todos los niños, somos una gran unidad familiar”, explicó Taya en diálogo con South West News Service. Unos años más tarde, fueron un paso más allá y decidieron tener hijos.
El cuarteto del poliamor tiene una relación “no jerárquica”, en la que intentan tener una cita cuádruple una vez al mes (y los días festivos y grandes eventos los pasan juntos) pero dan lugar también a las citas individuales. Cada una de las mujeres tiene sus propias habitaciones, en las que los hombres rotan para dormir cada noche.
En agosto del 2020, Alysia quedó embarazada, mientras que Taya hizo lo propio en marzo del 2021. El acuerdo fue que no importaría quién es el padre para cada chico, ya que todos estaban entusiasmados con la idea.
“No había regulación de quién era el padre y dijimos que no nos importaba. No sabemos y no queremos saber, dijimos que todos seríamos padres para todos ellos”, señaló Taya. Alysia dio a luz a un nene el 3 de abril de 2021 mientras que Taya dio a luz a otro varón el 11 de agosto de 2021, aunque a ambas mujeres le dicen “mamá” y a ambos hombres “papá”.
“La gente pregunta, ‘¿Hace alguna diferencia que uno no sea biológicamente mío?’ Pero me he quedado en casa con él desde que tenía unos meses y no hay nada que cambiaría mi relación con él si estuviera conectado biológicamente con él. Me resulta muy fácil amar a un hijo de cualquiera de las personas que amo, eso es lo mismo para todos los niños”, explicó Taya.
A su vez, la mujer explicó cómo lograron superar el “rechazo” de sus amigos y familiares a la idea, y cómo se fueron fortaleciendo íntimamente. “Muchas personas realmente no entienden el poliamor y piensan que es desviado o perjudicial de alguna manera. Es cierto que no siempre fue fácil, me tomó un tiempo admitir que tenía sentimientos por otra persona, y definitivamente a veces nos ponemos celosos, pero ahora es tan natural para todos nosotros y me siento muy agradecida de tener múltiples compañeros con los que criar a mis hijos”, cerró Taya.
Fuente la cien