Abel Pintos está a pleno, disfrutando de un excelente momento en su carrera. En medio de la gira por el país, “Abel en concierto”, ha visitado diversas localidades del noroeste y aún le queda mucho por recorrer. Comenzó a viajar en enero, y seguirá todo febrero, cantando en Cafayate (Salta), Junín (Buenos Aires), Río cuarto (Córdoba), Marcos Juárez (Córdoba), y Merlo (San Luis). En Marzo le toca cruzar el charco y presentarse en varias localidades de Uruguy.
Como todos los artistas, a la hora de cerrar los contratos, tienen sus exigencias. Y muchas de las más estrafalarias tienen que ver con lo que los cantantes piden para el detrás de la escena. Camarines, comida y bebida, suelen ser detallados con caprichos y curiosidades típicas de los divos. Pero el caso de Abel Pintos sorprendió, precisamente por lo contrario.
A la hora de pedir, el bahiense fue sumamente razonable. Se filtraron los requisitos que solicitó para cantar el lunes en Catamarca, y se lució por su sencillez. Se presentará en el Anfiteatro “Atuto Mercau Soria” a las 18, seguido de los artistas Ale Ayame, Aisha Yoma y Noelia Tula.
Uno de los coordinadores del evento reveló al medio local “El Ancasti” que Abel “es lo más simple que conoció”. Y detalló sus solicitudes, perplejo por lo fácil de complacer que le resultó.
La vida ordenada y saludable que lleva Abel Pintos durante las giras es la que le permite sobrellevar el ritmo tan intenso y demandante de los viajes permanentes. Y con sus “exigencias” para el show, demostró por qué es tan querido en todos lados. “Es lo más simpe que hay, una masa el chango”, opinó el organizador del evento.
