Este fin de semana tuvo lugar en Resistencia un hecho insólito. Un joven había recibido un disparo de arma de fuego en la cabeza, pero se acostó en su habitación. No fue sino hasta que familiares llegaron y lo vieron ensangrentado que recibió atención médica, y hoy se encuentra grave con asistencia respiratoria mecánica.
El caso ocurrió entre la noche del viernes y el mediodía del sábado, en Villa Río Negro, según confirmó el comisario Alejandro Domínguez, de la División Prensa de la Policía, en comunicación telefónica con Radio Nordeste (95.7 y 102.7) este lunes por la mañana.
La fuerza de seguridad tomó conocimiento el sábado al medioda «porque los familiares vieron que un joven de 21 años estaba acostado en su habitación y tenía sangre», por lo que lo llevaron al centro de salud del barrio, explicó el uniformado. Y agregó que el lesionado «presentaba una herida de arma de fuego en la cabeza».
«Hoy está en grave estado, con asistencia respiratoria mecánica», remarcó Domínguez, a la vez que indicó que por el hecho detuvieron a otro joven de 21 años que sería el presunto autor. También mencionó que ambos muchachos son vecinos y que el disparo se habría realizado «con una tumbera aparentemente».
