Según Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, agencia del Departamento de Salud y Servicios Humanos de los Estados Unidos (CDC), existe una multiplicidad de beneficios para la salud que se desprenden por tener una mascota.
Para empezar, pueden hacer que aumenten las oportunidades de las personas para hacer ejercicio, salir y socializar.
“Caminar regularmente y jugar con las mascotas puede disminuir la presión arterial, los niveles de colesterol y los niveles de triglicéridos, al mismo tiempo que pueden ayudar a controlar la soledad y la depresión, haciéndonos compañía”, sostiene el CDC.
Diversos estudios han demostrado que el vínculo entre las personas y sus mascotas puede mejorar el estado físico, reducir el estrés y brindar felicidad a sus dueños.
Entre los beneficios destacados, destacan la disminución de la presión arterial, los niveles de colesterol, los niveles de triglicéridos, los sentimientos de soledad, las oportunidades para estar al aire libre y para hacer ejercicio físico, y brindar mayores oportunidades de socialización.
De acuerdo a una investigación llevada a cabo por el NIH (National Institutes of Health de Estados Unidos), existe un gran número de beneficios para la salud de las personas por interacciones con los animales, específicamente con mascotas.
Según esta investigación, se ha demostrado que la interacción con animales disminuye los niveles de cortisol (una hormona relacionada con el estrés) y disminuye la presión arterial. Otros estudios han descubierto que los animales pueden reducir la soledad, aumentar los sentimientos de apoyo social y mejorar su estado de ánimo.
Los científicos se encuentran investigando de qué manera los animales pueden influir en el desarrollo infantil. Están estudiando las interacciones animales con niños que tienen autismo, trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH) y otras afecciones.
“No hay una sola respuesta acerca de cómo una mascota puede ayudar a alguien con una condición específica”, explicó la doctora Layla Esposito, quien supervisa el Programa de Investigación en Interacción humano-animal de NIH. “¿Su objetivo es aumentar la actividad física? Entonces, podría beneficiarse si tiene un perro. Tendrá que pasear a su perro varias veces al día y, así, aumentará la actividad física. Si su objetivo es reducir el estrés, a veces observar a los peces nadando puede brindar una sensación de calma. Entonces, no hay un solo tipo que sirva para todos”.
Los animales pueden servir como fuente de consuelo y apoyo. Los perros de terapia son especialmente buenos en esto. A veces, los llevan a hospitales o residencias para ayudar a reducir el estrés y la ansiedad de los pacientes.
Los investigadores están estudiando la seguridad de llevar animales a los hospitales, porque ellos animales pueden exponer a las personas a más gérmenes. Un estudio actual está estudiando sobre la seguridad de traer perros para visitar a niños con cáncer. Los científicos examinarán las manos de los niños para ver si hay niveles peligrosos de gérmenes transferidos del perro después de la visita.
Fuente infobae