La entidad que agrupa a los comercios minoristas detalló que las ventas en locales al público cayeron un 14% anual con todos los grandes rubros relevados. Pero, sin embargo, las que se realizaron a través del comercio electrónico subieron un 6,1%, con ningún rubro en descenso. «Más negocios se siguen sumando a ese canal de ventas, para captar especialmente a los segmentos jóvenes que compran desde sus dispositivos», explicaron.
Según la CAME, durante febrero las familias registraron «altos niveles de endeudamiento», en muchos casos como consecuencia de las fiestas de fin de año y de las vacaciones, pero también por las altas tasas de financiamiento que pagan cuando no se abona el total de la tarjeta. «Igualmente, sobre fin de mes en algunos locales se notó a la demanda como intentando empezar a moverse más», indicaron.
El 72,7% de los comercios relevados tuvieron bajas anuales en sus ventas, una mejora frente al porcentaje del mes de enero, cuando alcanzó el 77%. de enero. En el caso de los negocios que venden en la modalidad física y además electrónica, la suba de las ventas por Internet no alcanzaron para compensar al resto.
Las caídas anuales más profundas se registraron en los rubros bijouterie (-16,5%), calzado y marroquinería (-15,0%), joyerías y relojerías (-15,0%) y muebles (-14,5%). En indumentaria, en tanto, las ventas disminuyeron 13,8% frente a febrero de 2018 (bajaron 16,3% en locales físicos y subieron 1,3% en comercio electrónico). «Fue un mes malo para ese sector, donde tampoco pudieron repuntar los ubicados en zonas turísticas», precisó la CAME en su informe mensual.
«Muchos comerciantes están liquidando propiedades y vendiendo bienes para poder hacer frente a sus gastos», dijo Rubén Eduardo Barrios, vicepresidente de la Federación de Centros Comerciales a Cielo Abierto, Cascos Urbanos y Centros Históricos FCCA. El directivo expresó que si bien sus perspectivas para el año son negativas, espera que los préstamos a las pymes sean más baratos y que los consumidores puedan tener créditos a tasas más bajas para que se reactive el consumo.
El relevamiento abarcó 2.200 comercios pymes de la ciudad de Buenos Aires, Gran Buenos Aires y el interior del país en los principales rubros que concentran la venta minorista familiar.
Infobae.-