Gustavo Florentín ya se había escapado hace poco de una unidad en Las Breñas. Ayer se fugó junto a Roberto Díaz, detenido por presunto ultraje sexual. Es el tercer caso en una semana de problemas con alojados en las seccionales.
La grave situación carcelaria que padece el Chaco está pasándose el límite de lo tolerable, si es que se puede soportar algo así. Con la nueva fuga de internos de la comisaría de Corzuela, es el tercer caso en una semana, dejando al descubierto la necesidad imperiosa de construir nuevos edificios para el alojamiento de personas privadas de su libertad.
LAS FUGAS DE AYER
Fue alrededor de las 8.20. Se supo que de las celdas de la unidad se fugaron dos internos, Gustavo Fabián Florentín, de 29 años, quien está preso por supuesto robo con arma, vinculado al asalto a un productor rural de General Capdevila el año pasado; y Roberto de Jesús Díaz, de 44, acusado de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo.
En el caso de Florentín, no es la primera vez que se escapa de una unidad policial, antes se había fugado de Las Breñas, lo que abre un interrogante sobre si este hombre tiene facilidad para encontrar las puertas abiertas de su celda o cuenta con ayuda extra.
A la hora de la custodia de estos peligrosos sujetos, media docena de efectivos policiales estaba a cargo de esa tarea.
El sector de las celdas situadas en la parte trasera del edificio dispone de una puerta principal enrejada de acceso, cuenta como medida de seguridad dos pasadores de hierro, los cuales traban en la pared y con candado. En el interior existe un pasillo y cuatro celdas, dos de ellas con puertas ciegas de hierro, apreciándose en la parte de arriba una ventanita de dimensiones pequeñas.
En una de estas estaban alojados siete detenidos, incluido Díaz y, en la otra, sólo Florentín. También existe una tercera celda sin puerta, vacía y una cuarta con puerta reja, sin ocupantes, destinada al alojamiento de contraventores. Por último, hay un sanitario para uso de los internos. Todas las celdas cuentan con ventanas totalmente aseguradas con rejas, además del techo de los sectores del pasillo y baño.
A través de averiguaciones realizadas a los internos, se pudo establecer que los prófugos habían salido por el techo de la celda destinada a los contraventores, previo haber violentado tres seguros de la reja y puestos nuevamente en su lugar, desde adentro, por otros detenidos que actuaron como cómplices. Cuando la guardia entrante realizó el control de los presos, el portón principal de acceso se encontraba con el respectivo candado cerrado, y allí notaron las ausencias de Florentín y Díaz. Además se informó que la puerta interna de la celda en la cual se alojaba Florentín, durante la noche se cerraban con candado, pero el sábado por la noche, por descuido del llavero, la puerta no tuvo traba.
LA BúSQUEDA
El director de Zona Interior Charata, comisario general Carlos Galarza, encabeza la búsqueda de los fugados y cuanta con el apoyo de las divisiones Rural, 911, Infantería, Investigaciones y todas las unidades del área.
La Voz del Chaco