Las pastillas (anticonceptivos orales) son uno de los métodos de cuidado más extendidos en todo el mundo. A más de 60 años de su aparición, y con los avances científicos que mejoraron las formulaciones del pasado y lograron menores dosis hormonales en los comprimidos actuales, aún persisten falsas creencias y cierto desconocimiento respecto a su uso y efectos.
La doctora Marisa Labovsky, especialista en Ginecología Infanto Juvenil y Anticoncepción (MN 84.376), expresidenta de la Sociedad Argentina de Ginecología Infanto Juvenil (SAGIJ), indicó que en la actualidad las pastillas ocupan el segundo lugar luego del preservativo como el método de prevención más elegido. “Si bien en los últimos años métodos de larga duración como dispositivos intrauterinos (DIU) e implantes comenzaron a ganar terreno, las pastillas siguen siendo las más consumidas”, añadió la especialista.
El primer aspecto a tener en cuenta es que las píldoras deben ser siempre recetadas por un médico. Este debe tener en cuenta determinados factores de riesgo en la mujer, incluyendo la edad, el tabaquismo, el sobrepeso, el historial familiar de trombosis, presión arterial elevada y diabetes. Siempre se sugiere que sea indicada y supervisada por un profesional de la salud.
“Las pastillas contienen pequeñas cantidades de hormonas femeninas parecidas a las que produce el organismo. Al tomarlas diariamente se impide la ovulación y hacen que el moco del cuello de la matriz se vuelva espeso impidiendo el paso de espermatozoides. Son un método anticonceptivo muy seguro, con una efectividad del 98%, si se utilizan correctamente”, señaló la doctora Labovsky.
La especialista indicó que alrededor de las pastillas aún quedan falsas creencias y desconocimiento, pero destacó que, en efecto, las pastillas tienen más beneficios que riesgos.
Las pastillas, en el caso de las que contienen estrógenos, modifican algunas proteínas que intervienen en la coagulación de la sangre. Por eso el riesgo de problemas relacionados a la trombosis aumenta. Este incremento del riesgo depende, a su vez, de otros factores de las pacientes, como fumar, obesidad o si tiene trombofilia. Es por ello que el médico evalúa estos factores en la consulta para ver si puede, o no, indicar pastillas anticonceptivas a la paciente.
10 respuestas a las dudas más habituales
1 – ¿Puedo elegir no menstruar? Sí. Antes la dosficación de las píldoras venían en blísteres para 21 días de pastillas y 7 días inactivas. Al tomar las pastillas inactivas se produce un sangrado parecido a la menstruación. En la actualidad hay más opciones, incluso con modalidad de todas pastillas activas.
2 – ¿Las pastillas engordan? No. Algunas mujeres pueden experimentar un leve aumento de peso debido a la retención de líquido, sin embargo con los nuevos anticonceptivos que tienen un efecto antimineralocorticoide, esa retención es poco frecuente.
3 – ¿Provocan acné y más bello corporal? Falso. No solo que no lo desarrollan, sino que muchas veces la ingesta de pastillas se prescribe como tratamiento del acné por que mejoran el aspecto de la piel. Si bien en algunas puede ser un efecto secundario, lo que sucede en realidad es todo lo contrario.
4 – ¿Puedo tomar cualquier pastilla? No. Existen diversas composiciones y la historia clínica de la paciente determinará cuál es la más adecuada. Como todas las medicaciones pueden presentar algunos efectos secundarios por lo que es importante visitar al especialista para que indique la más apropiada.
5 – ¿Qué pasa si me olvido de tomarla un día? Existen opciones: tomarla apenas uno se acuerde o tomar dos juntas cuando corresponde al día siguiente (tener en cuenta que no en todas las marcas es igual). En situaciones de vómitos, si trascurren las primeras 4 horas de haber consumido la pastilla deberá considerarse como la toma olvidada. En gastroenteritis con diarreas durante varios días es importante utilizar otro método de cuidado (preservativo) hasta los 7 días posteriores al cuadro.
6 – ¿Tomando pastilla debo cuidarme con otro método? Los anticonceptivos tomados correctamente protegen de los embarazos no deseados, pero no de enfermedades de transmisión sexual por lo que en relaciones de riesgo se recomienda siempre el uso de preservativo.
7 – ¿Las pastillas afectan la fertilidad? No. Por lo general, la ovulación comienza de nuevo unas semanas después de abandonar el tratamiento. En un pequeño porcentaje de mujeres puede tardar algunos meses en aparecer, sobre todo en aquellas que ya tenían problemas previos de ovulación.
8 – ¿Las pastillas se toman hasta los 30 años? No. Las mujeres sanas que no fuman, pueden continuar tomando pastillas anticonceptivas hasta la menopausia.
9 – ¿Los antibióticos pueden reducir su efectividad? No. Los antibióticos no interfieren con la eficacia de las pastillas, salvo algunas excepciones. Siempre se aconseja consultar al especialista.
10 – ¿Disminuyen el deseo sexual? Esta idea nació junto con la creación de las pastillas. Si bien existen ciertas explicaciones biológicas, los estudios no respaldan esta creencia. Una revisión de 36 estudios realizados entre 1978 y 2011 reveló que solo el 15% de las mujeres sintió una baja en la libido al comenzar a usar la píldora, otro 22% dijo no sentir ningún cambio, y el 62% restante dijo sentir un aumento en la libido desde que comenzó a usar la píldora.
No todos los anticonceptivos son iguales ni resultan adecuados para todas las mujeres, por lo que se aconseja consultar con un especialista antes de empezar cualquier tratamiento anticonceptivo y llevar un seguimiento ante efectos secundarios.
Las pastillas son un método anticonceptivo seguro y eficaz, siempre y cuando se respete las pautas en la ingesta y sea utilizado correctamente, además, tienen muchos beneficios que no tienen que ver con la anticoncepción.