Empleadas domésticas: de cuánto puede ser el aumento de sueldo y cómo se aplicará

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El ministerio de Trabajo convocó para este jueves a la Comisión Nacional de Trabajo en Casas Particulares con el propósito de cerrar la paritaria 2022-2023, de la cual solo se otorgó un 15 por ciento a cuenta. Si se aplican los criterios de las últimas negociaciones, se tendría que otorgar alrededor del 55 por ciento de aumento (en cuotas), conformando una mejora anual del 70%.

Sin embargo, se están barajando otras opciones, como un acuerdo hasta noviembre, fecha en que volverá a reunirse el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil, organismo que está directamente ligado a la variable salarial de la actividad del personal doméstico.

Vale trazar el paralelismo. Hoy, el salario inicial de la actividad está, en el caso del personal con retiro, en $362,50 por hora y $44.517,50 por mes. Y personal sin retiro: $390,50 por hora y $49.503 mensuales. En tanto, el Salario Mínimo, Vital y Móvil pasó de $47.850 a $51.200 en septiembre; $54.550 en octubre y $57.900 en noviembre. Es decir, tres aumentos del 7% cada uno. Y está prevista una nueva reunión para noviembre, con el fin de acordar los incrementos, por lo menos, hasta marzo del 2023.

No se descarta que la cartera laboral siga en esta línea: aumentos por tramos hasta noviembre a la espera del nuevo encuentro del Consejo del Salario Mínimo. Entonces, los ingresos para las trabajadoras domésticas podrían rondar los $60.000 en noviembre/diciembre y la hora en $450.

Movilización mientras se desarrolla la negociación salarial

 

El encuentro de la Comisión Nacional del Trabajo de Casas Particulares se llevará a cabo en la sede central del ministerio que encabeza Claudio Moroni, en Alem 650. Hasta allí llegará una columna del Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares (SiTraCP) para reclamar un básico de $110.000, jubilación anticipada por tareas insalubres y fin a la precarización laboral. Se estima que la manifestación estará acompañada por movimientos sociales y políticos, en tiempos donde la conflictividad está en su máxima expresión.

La cifra de los $110.000 no es antojadiza, sino que está basada en los datos del INDEC para que una familia no sea considerada pobre. Desde el SiTraCP –que no tiene una silla en la discusión paritaria- señalaron a iProfesional que «estamos por debajo de la línea de la pobreza y en condiciones de desprotección laboral que, en estos tiempos, es insostenible».

Presión para llevar el sueldo básico de empleadas domésticas a $110.000: se moviliza el gremio

Presión para llevar el sueldo básico de empleadas domésticas a $110.000: se moviliza el gremio

 

El gremio hizo su aparición pública hace aproximadamente un mes, con una marcha que arrancó en el Obelisco y terminó en las puertas del ministerio de Trabajo.

Más terrenales, desde los gremios que si participan de la discusión salarial explicaron que «hay que realizar una actualización urgente y sentar bases para que no se repita la historia de este año, donde llevamos un par de meses sin actualizar los salarios y con una inflación arriba del 6 por ciento». Apuntaron que «esto llevó a una negociación entre la trabajadora y la parte empleadora en forma individual, desvirtuando los precios de referencia».

Contradicciones de una economía desvirtuada 

 

Sucede que esos $362,50 la hora «no existe; ni siquiera es una base, porque a los aumentos de la canasta básica hay que sumarle los del transporte». Entonces, hoy el valor hora de las tareas domésticas supera los $450, según la zona, agregando el viático.

Según voceros del sector, relataron que «en una economía desvirtuada, donde hay crecimiento y mayor productividad, vemos como el salario de los trabajadores y trabajadoras se deteriora día a día por la constante suba de precios y la falta de ordenamiento de parte del Gobierno».

Las contradicciones que se pueden dar  en la negociación es una muestra del descalabro que genera la inflación. Por un lado, subir los salarios blanquearía la situación actual; por otro, se teme que una fuerte recomposición de los salarios provoque recortes en las horas de trabajo de parte de un sector de los empleadores que también están afectados por sus ingresos, carcomidos por el costo de vida.

Las fuentes gremiales admitieron: «Lógicamente que los aumentos serán en cuotas; lo ideal es que no sean más de cuatro y, cualquiera sea el porcentaje del primer mes, debe ser retroactivo al 1 de agosto, porque venimos con un atraso salarial considerable, sin contar lo que venimos perdiendo en los últimos cinco años y el tiempo de pandemia, donde muchas trabajadoras no recuperaron el empleo».

Fuente iprofesional