Pasadas las 22:00 los padres de la joven Jessica Vasconcelos que fue asesinada en la vía pública por un conductor desaprensivo en 2016, fueron notificados de que su libertad corría peligro, por el solo hecho de pedir justicia.
El matrimonio (madre y padre de Jessica) de 66 y 64 años reclamaba en la vereda del Superior Tribunal de Justicia del Chaco que el asesino de su hija sea detenido, ya que pese a haber sido condenado por arroyar a Jessica y quitarle la vida, seguía manejando impunemente y fue registrado en videos luego de protagonizar otro siniestro vial días atrás.
Juan Gilberto Núñez Barúa, quien la había atropellado, se encuentra en libertad y con una prohibición de manejar por 10 años. Sin embargo, a fines de agosto protagonizó un sinietro vial al reencontrarse cara a cara con el padre de la víctima sobre avenida Ávalos. Barúa había intentado escapar de la situación en contramano, momento en que estuvo a punto de colisionar con otro vehículo, ocupado por un par de mujeres.
Si bien, luego de que se conocieran esos videos –que difundió Noticiero 9- el fiscal de Resistencia, Lucio Otero pidió la detención del asesino, pero pese a haber transcurrido más de dos semanas eso no fue resulto.
Ante la inacción de la Jueza Correccional 1, Francisco y María se convocaron en la puerta del máximo órgano judicial del Chaco, pero por “obstruir la vereda” la Jueza de Faltas de la provincia, Marcela Cortés.
La Jueza Cortes, encabezando una marcha pidiendo justicia por la muerte de su sobrino (25/ago/2020)
Finalmente, luego de varios minutos de negociación vía telefónica con la Magistrada y la intervención de organismos de Derechos Humanos, se logró suspender la orden Cortes y se acordó que los familiares de la víctima permanezcan en libertad, al igual que el asesino. El miércoles volverán al Superior Tribunal de Justicia, ya que este martes 15 los juzgados de toda la provincia permanecerán cerrados por celebrarse el “Día de la Magistratura”.
Fuente 21 tv
