En una de las localidades del sudoeste chaqueño, a 12 km de Enrique Urien donde las fuertes precipitaciones y la bajada del agua provocaron que las 450 hectáreas del productor ganadero Waldemar Ojeda se encuentre totalmente inundadas. «En estos momentos estamos muy complicado; porque nos ha llegado mucho el agua y el aliviador del Rio Muerto desbordó por lo cual entró el agua dentro de la casa, tuvimos que subir a los animales sobre unas chapas», dijo
Sobre la situación expresó: «El problema es el agua que viene y el agua que ha caído que es mucha, más de 250 milímetros y más de 50 metros el nivel del agua que corre».
Sobre los daños ocasionados «hay una mortandad de terneros y de gallina», procurando resguardar los demás animales. Y ante esta situación se presentó dubitativo pero «con la mirada hacia adelante siempre», finalizó
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