El Valium y la Viagra tienen una cosa en común aparte de empezar con V. Ambos fármacos fueron descubiertos por casualidad. Se crearon para tratar una enfermedad y resultaron ser mucho más efectivos contra otra. El siguiente en esta lista podría ser el Dupilumab, y su objetivo no es otro que la alopecia o bien conocida como calvicie.
El Dupilumab es un fármaco aprobado recientemente por la FDA (EEUU) para el tratamiento de un tipo de eczema severo conocido como dermatitis atópica. Esta afección, que aparece de forma esporádica en bebés, se convirtió en la pesadilla de una adolescente. Desde los siete meses de vida, la paciente comenzó a experimentar síntomas severos de dermatitis atópica, solo que la enfermedad no desapareció y se hizo crónica debido a un desorden de tipo autoiunmune.
Ninguna droga logró detener la afección, y con el paso de los años la joven se quedó completamente calva. Recientemente, los médicos decidieron tratar a la paciente con Dupilumab, y la dermatitis revirtió, pero además apareció un efecto secundario completamente inesperado: le volvió a crecer el pelo.
Al principio era pelusa de color claro como la que tienen los bebés, pero a medida que el tratamiento avanzaba nacieron pelos adultos con folículos pilosos completamente maduros. El crecimiento del pelo se detuvo durante unas semanas en las que el tratamiento se detuvo, pero al reanudarse el cabello se volvió a recuperar.
Maryanna Makredes Senna, autor del estudio sobre este insólito efecto secundario y médico en el Hospital General de Massachusetts explica que aún es muy pronto para saber si el Dupilumab será efectivo contra otros casos de calvicie. De momento, Makredes y su equipo han solicitado la puesta en marcha de una nueva tanda de ensayos clínicos con el objetivo de comprobar hasta qué punto el nuevo fármaco logra revertir los efectos en diferentes tipos de alopecia. Los médicos se muestran optimistas y creen que la droga podría curar al menos algunos de ellos, como la alopecia areata vinculada a dermatitis.
Vía Gizmodo [American Medical Association y Science Alert]