El cáncer es una enfermedad en la que influyen múltiples factores y la obesidad o el exceso de peso es uno de ellos. Pero en el mes contra el cáncer de mama un estudio publicado en la revista Cancer ha observado que perder peso tras la menopausia reduce el riesgo de cáncer de mama en mujeres de este grupo de edad.
Sin considerar el IMC, una reducción de 5% o más en el peso corporal tras la menopausia se asoció con menores probabilidades de tener cáncer de mama. Lo que señala que más allá de los kilos de peso propiamente dichos, el adelgazamiento ocasiona cambios metabólicos positivos que podrían ser los responsables de una menor incidencia de cáncer.
Por otro lado, las mujeres que aumentan de peso tras la menopausia no poseen un riesgo superior de cáncer de mama, pero sí se vinculó al desarrollo de un cáncer más agresivo, por lo que, comentan en Vitónica, nuevamente la relación entre obesidad y cáncer se pone en evidencia.
Entonces, para prevenir el cáncer de mama tras la menopausia, el descenso del peso corporal podría ser de ayuda según este estudio de tipo observacional pero realizado en el tiempo y apoyado con pruebas in vitro que confirman los resultados: las mujeres posmenopáusicas que pierden peso tienen menos riesgo de sufrir cáncer de mama.
Por supuesto, además de perder peso, realizar ejercicio con regularidad, no fumar, reducir al máximo la ingesta de alcohol, haber dado el pecho o amamantar si tienen o tuvieron un bebé y realizar una autoexploración periódica siempre son medidas que pueden ser de ayuda para la prevención y diagnóstico precoz del cáncer de mama.