A dos años del inicio de la causa, el Tribunal dictó la sentencia para los imputados por delitos de Lesa Humanidad. Los fiscales Ariel Belforte, Luis González y Mario Alurralde solicitó ocho condenas a perpetua y otras cuatro condenas de más de 20 años de prisión, solo uno fue absuelto.
En la causa se juzgaron delitos de torturas, desapariciones, y violación ocurridas en la ex Brigada de Investigaciones de la Policía de Chaco, el centro neurálgico del terrorismo de Estado en el NEA.
Los fiscales Carlos Amad, Patricio Sabadini y Diego Vigay se manifestaron conformes con el veredicto argumentando que esta sentencia «consolida la sentencia de la causa Caballero I».
LAS CONDENAS
Luis Alberto Patetta. Ex teniente primero del Ejército. 19 años.
Gabino Manader. Ex policìa. 25 años.
José Francisco Rodríguez Valiente. Ex policía. 20 años.
José Marín.Ex policía. 18 años.
José Tadeo Béttoli. Ex teniente coronel del Ejército. 12 años.
Ramón Esteban Meza. Ex policía. 19 años.
Enzo Bread. Ex policía. 18 años.
Albino Luis Borda. Ex policía. 22 años.
Ángel Jorge Ibarra. Ex policía. 12 años.
Antonio Muza Azar Curi. Ex jefe de Inteligencia de Santiago del Estero. 10 años.
Miguel Tomás Garbi. Ex policía. 10 años.
Miguel Pelozo. Ex policía. Absuelto.
LAS VÍCTIMAS
Pedro Morel y Sara Fulvia Ayala, quienes siguen desaparecidos. Eran de Formosa y militaban en las Ligas Agrarias de la zona de Goya, Corrientes. Estaban vinculados al Partido Revolucionario de los Trabajadores, PRT. Fueron vistos por última vez a mediados de 1977 en la Brigada de Investigaciones, privados de su libertad y en un muy mal estado de salud.
Carlos Erasmo Aguirre, Julio Aranda y Roberto Alcides Greca, quienes eran estudiantes universitarios y militaban en la Juventud Universitaria Peronista (JUP), en la Facultad de Arquitectura. Fueron secuestrados en noviembre de 1976. Mauricio Berger, un pequeño productor agropecuario y militante de las Ligas Agrarias de Chaco. Juan Carlos Goya (actual secretario de Derechos Humanos de la provincia), Graciela de la Rosa y Emilio Eduardo Saliva.