Casi 500 efectivos encabezaron un nuevo operativo de control y cumplimiento de las nuevas restricciones por la segunda ola de COVID-19 en la provincia.
Las tareas preventivas desplegadas durante la noche del sábado y madrugada del domingo culminaron con 120 personas notificadas por incumplir con la alarma sanitaria, 30 vehículos secuestrados y 10 fiestas clandestinas clausuradas.
Minutos antes de la medianoche, 200 efectivos de unidades policiales de toda la provincia desplegaron el “servicio de seguridad preventiva nocturna conforme las nuevas medidas sanitarias”, para efectuar tareas de vigilancia general, regular la circulación y permanencia de personas en la vía pública.
En este contexto controlan la circulación y permanencia en lugares de esparcimientos públicos y otros donde se congreguen o aglomeren personas, e invitan a la ciudadanía a que concurran a sus respectivos domicilios para evitar la propagación del coronavirus.
Según detallaron fuentes policiales, se identifica a las personas que se encuentren transitando para corroborar su permiso de circulación y/o turnos habilitantes; en caso de no estar habilitados para circular, se labra el acta respectiva conforme las reglamentaciones legales vigentes estipuladas para este tipo de situaciones.
Como resultado de los controles en toda la provincia, este primer fin de semana se notificó por infringir las medidas sanitarias a 120 personas, se incautaron 30 vehículos y se detectaron 10 fiestas clandestinas.
Operativo Diurno
Desde las 7 hasta las 22 (hora que inicia el toque de alarma sanitaria), unos 300 agentes de distintas unidades realizan sus labores con controles fijos y móviles en distintos puntos de la ciudad.
Con la colaboración de cadetes del instituto de Formación y de la División Caminantes, cubren el cuadrante del micro y macro centro capitalino, Barranqueras y Fontana.
En tanto que el personal de las comisarías y unidades especiales están apostados en las avenidas principales de la ciudad.
Fuente diario chaco