Hasta algunas semanas atrás el interior provincial mostraba una realidad totalmente distinta a la del Gran Resistencia frente a la pandemia de coronavirus.
El incremento de casos cotidianamente en el área metropolitana contrastaba con los escasísimos y esporádicos contagios que se registraban en el resto del territorio del Chaco.
Sin embargo, más reciemente ese panorama cambió. Y aunque la capital y sus alrededores siguen liderando cómodamente los datos sobre casos de covid-19 a nivel provincial, hoy son varias las localidades que muestran realidades preocupantes.
No tanto por los nuevos contagios en términos nominales, sino por el empinamiento que van tomando las curvas de contagios en esas jurisdicciones.
Una prueba muy notoria fue la decisión de volver a restringir actividades en Villa Ángela, y ayer se sumó General Pinedo, comuna para la cual el gobierno decretó el regreso a la fase de aislamiento social preventivo y obligatorio.
Pero además, fuentes consultadas por NORTE no descartan que una medida similar deba ser aplicada en los próximos días nada menos que para Presidencia Roque Sáenz Peña, la segunda ciudad del Chaco. Y Charata podría sumarse a la lista.
PARA ATRÁS
Ayer Casa de Gobierno informó oficialmente que “mediante el Decreto Provincial N° 1070/2020 el gobernador Jorge Capitanich dispuso el aislamiento social preventivo y obligatorio estricto hasta el 20 de septiembre de 2020 en la localidad de General Pinedo, suspendiendo las medidas implementadas en el marco del plan de desescalada aprobado por Decreto N° 843/2020 y su prórroga N° 1068/2020”.
Es decir, cancelando durante ese período las aperturas de actividades no esenciales. Capitanich también admitió que se monitorea “muy de cerca” la situación de Charata y especialmente la de Sáenz Peña, y no descartó que eventualmente “si en las próximas 48 a 72 horas no se observa un mejoramiento de los indicadores, se evaluará tomar una medida similar a la de Pinedo”.
El decreto difundido ayer determina que Pinedo deberá cumplir por 14 días “una cuarentena estricta y focalizada, permitiendo solamente el desarrollo de las actividades esenciales que aseguren la distribución de alimentos, los servicios municipales y los servicios de salud y seguridad, para “contener los efectos del covid-19 en dicha comunidad”.
Fuente norte