La crisis por el avance del coronavirus generó un alto impacto a nivel sanitario pero la cuestión económica también preocupa al Gobierno nacional que evalúa nuevas maneras de recaudar dinero para asistir a sectores que quedaron prácticamente paralizados desde el inicio de la cuarentena. En Diputados ya se encuentra en una fase avanzada el Impuesto a la Riqueza que tiene a Máximo Kirchner entre sus impulsores principales, con el respaldo técnico y político del titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, Carlos Heller. En tanto, Cristina Kirchner y su equipo trabajan para lograr la derogación del artículo del Impuesto a las Ganancias por el cual grandes empresas en sus balances pueden aplicar el ajuste por inflación. De acuerdo a los datos de AFIP, durante marzo la recaudación creció un 35,3% en términos interanuales, lo que significa al menos 15 puntos por debajo de la inflación estimada para el mismo período, que no bajaría del 50%.
Estas cifras terminaron de encender las alertas del oficialismo que está buscando recursos para poder enfrentar la baja en la recaudación que seguramente se mantendrá mientras dure la cuarentena y se extenderá hasta que se logre al menos una recuperación parcial de la economía.
El Impuesto a las Ganancias es uno de los que mejor reflejó la caída, con un incremento de solo el 30,9%, con lo que fue uno de los aspectos sobre los que el Gobierno planea trabajar. La mayor recaudación prevista por el Gobierno nacional se canalizaría a través de una tercera iniciativa que implicaría una baja de la carga tributaria a las Pymes, para enfrentar las complicaciones de la cuarentena. En términos prácticos, la intención del Gobierno con la modificación de Ganancias es que las empresas paguen más impuestos. Hasta ahora se toma la evolución de sus variables como pueden ser los ingresos, la facturación o las ganancias en términos nominales y no se tiene en cuenta la inflación que hubo antes de que se le calculen los impuestos. Como se trata de temas tributarios, el Poder Ejecutivo no los puede sacar por DNU y deberían ingresar por la Cámara de Diputados. El Impuesto a la Riqueza ya cuenta con la luz verde del presidente Alberto Fernández que analizó el tema con Máximo Kirchner, Heller y Martín Guzmán hace algunos días, pero las dificultades que encuentra el oficialismo para avanzar con las sesiones virtuales más el conflicto con la Corte Suprema que ya anticipa que no se expedirá sobre la constitucionalidad de una modalidad no presencial de reuniones, dilata la presentación de los textos.
Con la alternativa más conservadora que implicaría una alícuota del 1% a las grandes fortunas, el Gobierno podría obtener por única vez un incremento en la recaudación de 800 millones de dólares, aunque se analizan alternativas diferenciadas para las que se encuentran en el exterior, como ejemplo. Desde la oposición, el jefe de la bancada de senadores de Juntos por el Cambio Luis Naidenoff coincidió en dar absoluta importancia a la cuestión económica. «En el medio de la pandemia, está también el problema de la economía. Y tenés que tener tres miradas. Lo inmediato, el transcurso de la pandemia hasta junio o julio, y luego cómo seguimos hacia adelante. Y no observo en el gobierno una mirada integral. Desde nuestro interbloque tenemos la responsabilidad de trabajar de una manera mancomunada con el gobierno, y es lo que estamos pidiendo”, afirmó el senador por Formosa.
Fuente Perfil por Daniela Mozetic