Una historia inspiradora de amor fraternal, principalmente porque a un miembro de la familia le toca volver a enfrentar la lucha contra el cáncer se hizo viral en Facebook, luego que todos los hermanos se raparan la cabeza para no dejar sola a Fabiana Villalba (25) en su tratamiento.
La pelea contra la enfermedad no es de ahora, la chica había tenido un diagnóstico de cáncer en un ovario en 2017, aparentemente encapsulado y que fue extirpado.
En aquel entonces, todos los estudios realizados con posterioridad a la cirugía le habían dado la esperanza que lo había vencido. Dos años después, en diciembre del año pasado, tuvo que volver a enfrentar el diagnóstico de un tumor maligno que había hecho metástasis y que está afectando la cavidad retroperitoneal (que cubre la mayoría de los órganos del abdomen).
“En diciembre ella ya se veía bastante desmejorada, había adelgazado mucho y tras un control, porque se le habían inflamado los ganglios linfáticos de la ingle, le volvieron a diagnosticar la enfermedad y que había hecho metástasis. Somos muy unidos todos, las cuatro hermanas y nuestro hermano mayor. Queríamos que ella sintiera que en esta también estamos juntos”, explicó a PRIMERA EDICIÓN Rocio, una de las hermanas quien contó la historia en su perfil de la red social.
Luego de haber estado internada varios días con fiebre alta, Fabiana también relató cómo afronta lo que le toca vivir: “Empecé con la primera de las seis quimios, y ya había decidido raparme, nunca imaginé que mis hermanos me iban a acompañar de esta forma”, se emocionó.
“En 2017 después de la extirpación de un ovario me habían dicho que los resultados de remisión eran favorables, con lo cual no necesité hacer quimio. Ahora me sentía afectada porque no quería ver el proceso de perder el pelo. Era algo que me angustiaba, entonces mis hermanos, como broma, me dijeron que también se iban a rapar. Cuando los vi, lo primero que les dije fue ‘que locos están’ pero la verdad es que me sentí muy amada, muy afortunada de tener hermanos así”, aseguró con alegría.
Fabiana tiene dos hijos, de 8 y 2 años, es la del medio entre cinco hermanos: el varón y una hermana antes que ella, y dos hermanas menores.
Contó a este Diario que cuando se vence al cáncer “se necesita un plus emocional” y aseguró que no va a bajar los brazos gracias a la fuerza recibida de parte de su familia.
Emotiva sorpresa
Andrés, Adriana, Rocío y Lucía fueron cómplices en la sorpresa inesperada y feliz que recibió Fabiana este martes, cuando todos se presentaron rapados ante ella.
La médica que la atiende en el Instituto Misionero del Cáncer situado en el Parque de la Salud le explicó los síntomas que empezará a tener en cada sesión.
“Estuve internada para estar controlada porque hice fiebre alta y el lunes recibí el alta. Me desconsolaba ver mi cabello quedar en la cama del hospital. Me puse mal y como no me dejaban raparme ahí, lo hice el martes estando en casa”, recordó.
“Cuando mis hermanos me dijeron que se iban a rapar, pensé que sólo iba a ser mi hermano porque a los varones no les preocupa mucho su cabello y les crece rápido. De mis hermanas realmente no me esperaba, nosotras las mujeres somos más coquetas con nuestro cabello y sinceramente pensé que no iban a hacerlo”, se rió.
“Cuando vi a los cuatro juntos, todos rapados me sorprendí. Sentir su apoyo me dio mucho ánimo”.